lunes, 31 de enero de 2022

¿A que edad le damos el móvil al niño?

 La preocupación por el tiempo que pasan los menores con una pantalla en las manos crece según se va sabiendo más sobre los efectos adictivos que alimentan algunas ‘apps’ y plataformas. Países como Italia ya debaten si legislar al respecto. ¿Tiene sentido prohibir los ‘smartphones’ por ley hasta una determinada edad?

Algunas respuestas a estas preguntas que tantos nos hacemos podemos encontrarlas en este interesante artículo de Begoña Gómez Urzaiz, publicado en El País el pasado 9 de enero.



En su libro Contemplaciones (Salamandra), la escritora británica Zadie Smith cuenta la siguiente anécdota: iba ella por la calle, y, como buena novelista, se dedicaba a escuchar la conversación de dos mujeres, que criticaban a otra que acababa de pasar, paseando a un bebé de unos nueve meses en un carrito. El bebé llevaba un iPad. Smith asumió que sus espiadas se escandalizaban porque tuviera un aparato electrónico potencialmente nocivo para un niño tan pequeño, que aún no es capaz de hablar ni andar y apenas se sostiene sentado. Pero no. Lo que alucinaba a las mujeres, descubrió Smith enseguida, era que dejaran manejar a un bebé un cacharro de más de mil euros. La autora se reía de sí misma y de su sesgo de clase media-alta: “En mi privilegio, había confundido un argumento ético con otro”.

La viñeta que narra es ilustrativa de hasta qué punto la preocupación por la cantidad de tiempo que los niños pasan con una pantalla personal en la mano, con una tableta o un teléfono inteligente, ha escalado posiciones en el marco mental de la crianza, o al menos de la crianza en ciertos ámbitos. Cada mes se publican estudios que alertan de los peligros de mezclar esas dos cosas, niños y teléfonos con conexión de internet. Habrá consecuencias, nos dicen esos estudios, en el ámbito cognitivo, neuronal y emocional. Y mientras, en las casas sigue la lucha para arrancar el aparato de las manos del niño, para retrasar un poco la compra del primer smartphone propio, que en España suele darse a los 11 años —según un estudio de Unicef que sondeó a 50.000 adolescentes—.

A los 11, la mayor parte de los menores ya ha pasado mucho tiempo con un móvil en las manos (711 horas para los niños menores de 11 años, según un estudio de la consultora Qustodio de 2019), y los adultos que le rodean han pasado quizá la misma cantidad de tiempo torturándose por permitirlo. De vez en cuando, un pánico moral de alto voltaje, como el reciente en torno a El juego del calamar —la popular y violenta serie de Netflix que algunos niños imitaban en el patio del colegio el año pasado, lleva a la esfera pública unas conversaciones que generalmente se producen de puertas adentro.

Si este, el acceso de los niños a los aparatos, es un problema social, ¿es legítimo esperar que sea el Estado quien legisle al respecto, en lugar de dejar que en cada casa se imponga una regulación improvisada? El debate resurge cada cierto tiempo. En Italia existe un anteproyecto de ley, propuesto por Forza Italia, para que el acceso de los niños a los teléfonos inteligentes sea ilegal hasta los 14 años. Una subsecretaria del Ministerio de Salud llamada Sandra Zampa dijo al respecto en enero del año pasado: “Es una tontería que para conducir el coche se necesite carné de conducir y para utilizar un teléfono móvil no haya límites de edad. Los teléfonos inteligentes son tan poderosos como los automóviles, si no más, y se deben hacer distinciones en la posibilidad del uso del móvil en función de la edad de los niños”. El senador del partido que fundó Silvio Berlusconi encargado de defender la propuesta en el Senado, Andrea Cangini, añadió: “Estamos creando generaciones de dementes digitales, es difícil limitar el uso porque sus efectos son los mismos que los de la cocaína”. Es lo más lejos que ha estado un país desarrollado de legislar sobre el asunto. Francia prohibió el uso de móviles en las escuelas en 2018.

Hay que recordar que, ya a finales de los años veinte, unos científicos alemanes probaron que el tabaco causaba cáncer de pulmón. Se tardó casi 60 años en llegar a una legislación que prohibiera el consumo de tabaco a menores de 16 años en España. Ocurrió en 1982.

El filósofo británico Julian Baggini escribió en 2017 un artículo en The Guardian bastante categórico que abogaba por esa prohibición. Sin embargo, cinco años más tarde, no lo tiene tan claro. “Las cosas han cambiado mucho y la idea de una prohibición total ya no es creíble”, dice por teléfono. Los smartphones se han convertido en una parte integral de cómo vivimos, como señalan pensadores como David Chalmers, que argumentan que el móvil es una extensión de nosotros mismos, donde almacenamos nuestros recuerdos y nuestras ideas. Por tanto, prohibirlos es como que te quitaran parte del cerebro. Baggini dice que es “agnóstico” respecto a la intervención estatal, pero sí aprueba medidas como la francesa y cree que debería haber autorregulación por parte de las empresas digitales y de las redes sociales. Justo antes de convertirse en Meta, el malherido Facebook tuvo que matar internamente su idea de un Instagram para niños cuando sus informes concluyeron que los daños potenciales eran tan grandes que no valía la pena arriesgarse.

Jorge Cardona, especialista en derechos de la infancia y exmiembro del Comité de Derechos del Niño de las Naciones Unidas, tampoco cree que se deban prohibir los móviles a los niños y no compra el paralelismo que suele hacerse con las drogas y el alcohol. “La gran diferencia es que la tecnología tiene grandes virtudes y ventajas, y el acceso al entorno digital es un derecho, por eso que no puede limitarse”, argumenta, aunque admite que en los organismos internacionales preocupa mucho este problema. “En muchas ocasiones nos encontramos con que las familias no tienen la formación para limitarlo, pero no podemos cercenar los derechos de los niños porque sus padres no tengan esa formación. Lo que tienen que hacer las administraciones públicas es dar apoyo a los padres para que cumplan con sus obligaciones parentales”, opina el jurista.

La psiquiatra infantil Lefa S. Eddy, experta en el uso de pantallas y tecnología, apunta que la cuestión no está tanto en el cuándo se accede a los móviles, sino en el cómo. “El acompañamiento es básico. No puede ser que un chaval disponga del móvil toda la noche, veo niños que están hasta las cuatro de la madrugada chateando. Creo que los padres de dentro de 5 o 10 años lo harán mucho mejor que los actuales, porque ellos ya habrán crecido con smartphones”. La doctora confirma que desde la pandemia está tratando muchos más casos de depresión y ansiedad infantil, que empiezan a veces tan pronto como a los siete años. “En aspectos como las autolesiones, se está notando la influencia de las redes. Los adolescentes se cortan, lo fotografían, lo cuelgan en Instagram y reciben me gusta. Y lo mismo con los trastornos de conducta alimentaria. Si cuanto más delgada está una niña más likes recibe, ¿eso cómo se controla?”, se pregunta.

Hay también indicios de problemas derivados del uso de móviles, como la falta de atención. Eva Marrugat, de 51 años, da clases de Sociales en un instituto público de Tarragona “socialmente transversal” y hace años que dejó de requisar móviles en las aulas. Los padres, dice, se enfadaban. Y además, son demasiados. Todos sus alumnos tienen móvil inteligente. “Los chicos, sobre todo, están enganchados a juegos como el Clash Royale y cuando entro a clase me dicen: ‘Profe, déjame acabar la partida, que si no pierdo los puntos”. También ha presenciado casos de ciberacoso y extorsión sexual —según un estudio de Unicef, uno de cada diez adolescentes ha recibido proposiciones sexuales de adultos—, y adicción a las apuestas, sobre todo en los cursos de Bachillerato. Su observación como profesora veterana es que ahora “van demasiado rápido y no asimilan las preguntas” en parte por su distracción digital, aunque quizá son mejores a la hora de hacer más de una cosa a la vez.

Uno de los estudios más extensos que se han hecho hasta la fecha para tratar de cuantificar esa causalidad entre uso de smartphones y trastornos mentales en los niños lo lideró la psiquiatra canadiense Elia Abi-Jaoude. Ella incide en que el tema debe abordarse desde una perspectiva amplia, no solo médica. “Hay evidencias del papel de los teléfonos y de las redes en los problemas de salud mental de los adolescentes, pero es improbable que esta sea la única explicación. Hay muchos otros factores, socioeconómicos y culturales, que contribuyen. Lo importante no es regular sino responder con iniciativas que subrayen el bienestar familiar y la resiliencia de los jóvenes”. Abi-Jaoude también apunta al uso positivo de los móviles para salvar a los niños de su aislamiento durante la pandemia. Entonces, ¿a qué edad le daría ella un móvil a un niño? “No se trata tanto de una edad cronológica, eso depende del niño y de su desarrollo socioemocional. Lo que sí recomiendo es que no se les deje usar por las noches y que los adultos recuerden que su propio uso es el modelo”.

Esta semana, el experto en alfabetización digital Jordan Shapiro se mostraba partidario, en una entrevista concedida a este periódico, de darle el móvil a los niños antes de los 13 años, cuando aún se dejan aconsejar.

Con el reciente pánico del calamar en España se hizo viral un hilo de Twitter de la experta en educación Catherine L’Ecuyer en el que señalaba que solo en las casas donde se ha “tirado la toalla” había problemas de ese tipo, y que la receta para evitarlos era que los niños no tuvieran acceso a pantallas ni smartphones, ni siquiera después de los 14, y que no existiera suscripción a Netflix en el hogar. En lugar de eso, un solo ordenador en el pasillo para uso escolar, mucha conversación, libros y películas en familia. En cuanto empezó a circular por Twitter, algunos usuarios secundaron su postura y dijeron que ese era precisamente su estilo de crianza. Pero hubo muchas más respuestas señalando que todo lo anterior era impracticable, poco realista, caro y potencialmente dañino, puesto que la intimidad digital que tienen los adolescentes en sus redes también es eso, intimidad.

Quizá la preocupación por las pantallas es algo que solo pueden permitirse los padres de clase media para arriba, como apuntaba Zadie Smith en su ensayo. Nos hemos cansado de oír que los líderes de Silicon Valley educan a sus hijos sin móviles en casa y en colegios desenchufados. El filósofo Eudald Espluga habla en su libro recién publicado No seas tu mismo (Paidós) de “puritanismo digital”, lo que sucede cuando se piensa en la tecnología como adicción y se percibe “como una tentación que debemos evitar si queremos llevar una vida productiva, disciplinada y honrada”. Espluga cree que este pánico relacionado con los niños ya existía antes de los smartphones: es el mismo que generaron la televisión o los videojuegos, que fueron vistos como influencia corruptora. Y critica que este puritanismo digital no cuestione “las bases económicas, políticas y éticas del capitalismo de plataformas”, sino que se limite a proponer un consumo recatado de las mismas. El autor también ve un sesgo clasista en lo que ve como un neoludismo aplicado a la infancia. Ni todos los niños y niñas tienen la misma experiencia digital ni a todos les es igual de posible desconectar. “Igual que comer dulces o ducharse regularmente, tiene que ver con la conciliación laboral de los padres y con las posibilidades económicas de ocio alternativo”, señala.

Cualquier análisis o intento de regulación de los niños y los aparatos electrónicos tendrá que tener en cuenta también eso, que en muchas familias se da el iPhone al niño para calmarlo, pero también para que sus exhaustos padres puedan cumplir con sus largas obligaciones laborales.


https://elpais.com/ideas/2022-01-09/a-que-edad-le-damos-el-movil-al-nino.html?event_log=fa

viernes, 28 de enero de 2022

Diez cortos para trabajar el Día de la Paz y la No Violencia

ENLACE A LOS SIGUIENTES CORTOS 
-Trabajamos la inclusión 
-El valor de la empatía 
-Trabajamos la convivencia 
-Trabajamos los conflictos
 -Trabajar la colaboración 
-Trabajar la tolerancia 
-El Poder de los abrazos 
-Ayudar a los demás 
-Eliminar etiquetas 
-Trabajar el perdón 

 https://educaciondivertida.com/10-cortos-para-trabajar-el-dia-de-la-paz/

jueves, 27 de enero de 2022

La guerra por mi cuenta: ¿eres violento?

A continuación encontrarás unas cuantas frases que reflejan actitudes o formas de ser y pensar que son frecuentes en muchas personas. Rodea con un círculo el número que mejor te refleje, teniendo en cuenta que el 5 significa el mayor grado de tu identificación; y el 1 el menor. Después realizaremos una valoración personal sobre estas actitudes violentas y, finalmente, tendremos una puesta en común cuando tu tutor/a lo indique.


miércoles, 26 de enero de 2022

Tomando posiciones ante la guerra y la violencia. Actividad de Tutoría

En estos días estamos desarrollando en las horas de tutoría diferentes actividades para conmemorar el Día Escolar de la no Violencia y la Paz (DENYP).

Con la presente actividad queremos reflexionar sobre los valores, intereses e ideas que todos tenemos sobre la guerra, los ejércitos, la resolución pacífica de conflictos...

Sigue las instrucciones de tu tutor/a y lee la ficha que figura a continuación. En ella se describe el desarrollo de la actividad, las cuestiones sobre las que tendrás que "posicionarte" y las indicaciones para el debate colectivo que tendremos en el grupo.

DESCÁRGATE LA FICHA


martes, 25 de enero de 2022

LA GUERRA EN UN MINUTO

Estos impactantes vídeos de la ONG "Save the Children" pretenden concienciarnos sobre las consecuencias de las guerras, con la mirada puesta en la última gran guerra de estos años, la de SIRIA, pero aplicable a cualquier guerra.

Los vídeos han querido recrear cómo sería el drama de la guerra en el Reino Unido con unas impactantes imágenes. "¿Podría pasar esto alguna vez aquí?" se pregunta la organización, que muestra los terribles efectos de la guerra en los niños.

Vamos a visionarlos con mucha atención y después, siguiendo las indicaciones de tu tutor/a, tendremos un debate colectivo sobre ellos.

El primer vídeo muestra como sería la guerra en Londres... o en Madrid... o en cualquiera de nuestras ciudades. En pocas horas, en pocos días... nuestra vida cambia como nunca nos hubiésemos podido imaginar. Igual que les ha pasado a los niños en Siria en estos últimos años. Comienza el día en que una niña inglesa cumple 8 años y muestra aspectos de su vida diaria en Londres, en su casa, con su familia y sus amigos. La situación cambia drásticamente cuando llega la guerra y con ella el miedo, la falta de alimentos y medicinas. La cara de la pequeña refleja a lo largo del minuto y medio del montaje ese cambio brutal que pasa del rostro de felicidad inicial a la angustia y al miedo en el momento en que estalla la guerra. El vídeo termina con el lema "Que no lo veas, no quiere decir que no ocurra".



En este otro, con el título "Está pasando.Está pasando aquí" se muestra el viaje de una niña refugiada en dos minutos. Igual que les ha pasado a tantos chicos y chicas sirios...
En el vídeo, la niña protagonista abandona su hogar asediado por las bombas; duerme a la intemperie; viaja en una barcaza sola y termina naufragando en medio del mar. Es rescatada y atendida en un hospital. Una ficción que por desgracia no siempre se cumple en la realidad:




La guerra afecta a todas las personas,... pero especialmente a los niños, como nos recuerda la ONG "Save the Children" que trabaja por ellos.

viernes, 21 de enero de 2022

Actividades para el Día Escolar de la No Violencia y la Paz (DENYP)

En los siguientes enlaces puedes encontrar actividades de Tutoría, Fichas de trabajo, y documento sobre el Día Escolar de la No Violencia y la Paz.














sábado, 15 de enero de 2022

Análisis de los resultados de la evaluación por los Departamentos

Al objeto de facilitar en el seno de los departamentos el análisis de los resultados de la 1ª evaluación, se señalan una serie de cuestiones , en la ficha que se adjunta, que pueden servir para orientar la reflexión colectiva.

1.-VALORACIÓN GLOBAL DE RESULTADOS

Tomando como referencia los resultados cuantitativos de la evaluación puede reflexionarse acerca de cuestiones como:

-Porcentaje de aprobados/ insuficientes..
-Comparación entre las distintas materias del departamento.
-Comparación entre las distintas materias de un mismo nivel/grupo de alumnos/as.
-Causas que puedan explicar resultados dispares obtenidos en la misma materia en distintos grupos de un mismo nivel impartidos por un mismo profesor/a.
-Idem… impartidos por distintos profesores/as.
-Comparación, si procede con resultados de cursos anteriores


2.-POSIBLES CAUSAS:

Nos centramos en la enumeración de aspectos negativos que puedan dar pistas para valorar los resultados poco satisfactorios, insistiendo en la idea de que sería también necesario entrar en el análisis de causas que expliquen los resultados positivos (cuando sea el caso) que se obtienen en determinadas asignaturas y/o grupos.

 A) RELACIONADAS CON EL GRUPO DE ALUMNOS/AS

* Características. Clima el grupo. Actitudes:
-Alto porcentaje de alumnado repetidor, alumnado con materias pendientes, desfase escolar...
-Presencia de alumnado "problemático"...
-Escasa participación y atención.
-Falta de interés por aprender.
-Clima poco favorable para el trabajo: comportamiento "problemático" y negativo.
-Relaciones conflictivas profesorado/alumnado…

* Hábitos de trabajo:
-No realizan habitualmente las tareas.
-Apenas estudian.
-No entregan los trabajos encomendados...

* Dificultades de aprendizaje:
-Déficits en los aprendizajes básicos (falta de "base")
-Dificultades en el método de estudio
-Falta de hábitos de estudio y trabajo…

B) RELACIONADAS CON LA ASIGNATURA

Aunque la naturaleza de las distintas asignaturas dificulte planteamientos de carácter general, se trataría de reflexionar acerca de cuestiones como:
-¿Qué medidas podrían tomarse si un número relativamente alto de alumnos/as de un grupo no ha superado la materia?
-¿Qué actuaciones  podrían plantearse si un número importante de alumnos/as de un grupo no domina los niveles previos, tiene "falta de base" o lagunas importantes, que le impiden progresar en sus aprendizajes?
 -¿Que modificaciones pueden introducirse en la programación, metodología, evaluación... para mejorar los resultados?
 -...

Para ello se pueden analizar, de cara a plantear propuestas de mejora cuestiones como las siguientes:

 -Aspectos básicos (o conocimientos previos) deficitarios que precisan refuerzo o actividades complementarias. En la medida que  puedan ser abordados desde  otras materias podrían ser tratados también por otros profesores/as.
-Dificultad especial de los contenidos. Replanteamiento en su caso de su secuenciación, priorización,   adaptación, predominio  de conceptos sobre procedimientos y actitudes (o a la inversa)...
-Planteamiento didáctico no adaptado a las características del grupo.
-Metodología de trabajo en clase: Aspectos en los que se hayan apreciado especiales dificultades   (presentación y exposición de   temas, trabajo en clase, tareas para casa, trabajos individuales y/o   colectivos...)
 -...

 3.-MEDIDAS EDUCATIVAS COMPLEMENTARIAS Y DE APOYO. PROPUESTAS DE MEJORA
(Qué podemos/vamos a hacer para tratar de mejorar los resultados)

Para dar respuesta a los problemas detectados pueden plantearse diferentes actuaciones:
-Refuerzo en técnicas de estudio y hábitos de trabajo.
-Refuerzo para la comprensión / expresión oral y escrita.
-Refuerzo en requisitos previos: "repaso" o refuerzo mediante actividades complementarias de cuestiones básicas.
-Refuerzo en "habilidades sociales" , mejora del clima de trabajo del aula…
 -Adaptación en contenidos.
-Adaptación en aspectos didácticos y metodológicos.
-Adaptación en los tiempos.
-Adaptación en los trabajos y tareas. Selección de actividades más relevantes.
-Adaptación en la evaluación.
 -Seguimiento individual de alumnos/as.
-Seguimiento "especial" de algunas cuestiones: disciplina, tareas, mejora del clima de trabajo, participación, "plan de estudios personal"...
-Entrevistas personales con alumnos/ padres.
-Reuniones colectivas con alumnos/ padres.

domingo, 9 de enero de 2022

Volvemos al trabajo: ponte las pilas para el segundo trimestre


Al empezar un nuevo trimestre hacemos buenos propósitos para superar lo que hemos hecho hasta ahora. Si tus resultados en la Primera Evaluación fueron positivos, deberás seguir esforzándote para mantenerlos y para conseguir mejorarlos en lo posible.

En el caso de que las cosas no te fueran bien, seguro que durante las vacaciones habrás hablado de ello con tus padres y te habrás comprometido a intentar aprobar el curso. Es fundamental, ante todo, que no te desanimes porque aún estamos a tiempo de corregir lo que salió mal. Si trabajas más y mejor, si desde el primer día  intentas organizárte adecuadamente, seguro que tendrás mejores resultados.

¡Hay que volver a trabajar con muchas ganas! Para empezar de una manera más eficaz, te proponemos unos consejos. Si los cumples, cargarás LAS PILAS para este segundo trimestre que estamos estrenando:

A) TUS ESTUDIOS SON TU TRABAJO
Ahora que hay tanto paro, tú tienes un trabajo que hacer: estudiar más y mejor.
En el trabajo, como hacen tus padres, hay que “ser serios” y cumplir con las obligaciones. Tú también tienes que cumplir con ellas. Para ello debes:

-Organizar y planificar el tiempo de estudio y tareas, haciéndote un horario y tratando de cumplirlo diariamente sin excusas.
-Trabajar en tu casa en un lugar cómodo y tranquilo, sin ruidos, donde puedas hacer las tareas y repasar sin que nadie te moleste ni te interrumpa.
-Estar atento en clase a las explicaciones, sin molestar a profesores y compañeros.
-Anotar en tu agenda diariamente todas las tareas y repasos que indiquen los profesores/as.
-Si tienes materias pendientes o tienes que recuperar algún cate de la primera evaluación, debes adelantar todo el trabajo que puedas en estos primeros días del trimestre -cuando hay menos tareas- no dejándolo para el final.

 B) HAZ UN PLAN DE ESTUDIOS Y TRABAJA TODOS LOS DÍAS
-Dedica cada tarde entre 2-2,30 horas (al menos) a las tareas y repasos. Incluye en tu plan de trabajo diario:
-Las TAREAS “INMEDIATAS”: las que tienes que hacer para mañana o pasado.
-Las TAREAS a “MEDIO PLAZO”: trabajos y tareas que tienes que hacer para dentro de unos días o unas semanas. Aprovecha esos días en los que no tienes tareas más urgentes para dar un empujón a estas “tareas a medio plazo”.
-REPASOS: trata de repasar cada tarde al menos un par de materias para llevarlas así todas al día.
-ESTUDIO-PREPARACIÓN de EXÁMENES: si te queda algo de tiempo, dedícate a estudiar y a preparar los exámenes que tendrás más adelante.
-RECUPERACION DE PENDIENTES (si es tu caso).

C) PARA RENDIR... HAY QUE CUIDARSE
¿Quién ha dicho que estudiar sea fácil? Estudiar es un trabajo duro para el que también hay que "estar en forma”. No se puede venir cansado y con sueño a clase, ni atender y estudiar si no se tienen hábitos de vida saludable. Para ello:
-Desayuna de manera suficiente antes de venir al instituto.
-No te acuestes tarde. Descansa lo necesario.
-Controla las horas que dedicas al ordenador y a la televisión: no te pases.
-No estudies (ni te acuestes) con el móvil conectado. Deja el móvil en tu casa al venir al instituto.
-Práctica, si puedes, algún deporte.
-Trata de llevar una vida saludable, sin fumar ni consumir alcohol.
-Los fines de semana trata de reservar un rato para estudios y tareas: si te organizas hay tiempo para todo.

¡Ánimo! ¡PONTE LAS PILAS!

-DESCÁRGATE LA FICHA CON LAS ORIENTACIONES

miércoles, 5 de enero de 2022

CUANDO NO VIENEN LOS REYES

En una fecha tan especial, os dejo este hermoso poema de Miguel Hernández con mis deseos de que vuestros zapatos se llenen del calor de los que os quieren y de la fuerza que necesitamos para trabajar por un mundo más justo.  En estos días en los que la fiesta de los Reyes lo preside todo y no faltan en cada casa un buen puñado de juguetes, conviene recordar, pensar, reflexionar, sobre otras realidades. Este poema, que trabajé en alguna ocasión en clase con mis alumnos, es una buena herramienta para ello.

LAS DESIERTAS ABARCAS


Por el cinco de enero,
cada enero ponía
mi calzado cabrero
a la ventana fría.

Y encontraba los días
que derriban las puertas,
mis abarcas vacías,
mis abarcas desiertas.

Nunca tuve zapatos,
ni trajes, ni palabras:
siempre tuve regatos,
siempre penas y cabras.

Me vistió la pobreza,
me lamió el cuerpo el río
y del pie a la cabeza
pasto fui del rocío.

Por el cinco de enero,
para el seis, yo quería
que fuera el mundo entero
una juguetería.

Y al andar la alborada
removiendo las huertas,
mis abarcas sin nada,
mis abarcas desiertas.

Ningún rey coronado
tuvo pie, tuvo gana
para ver el calzado
de mi pobre ventana.

Toda gente de trono,
toda gente de botas
se rió con encono
de mis abarcas rotas.

Rabié de llanto, hasta
cubrir de sal mi piel,
por un mundo de pasta
y unos hombres de miel.

Por el cinco de enero
de la majada mía
mi calzado cabrero
a la escarcha salía.

Y hacia el seis, mis miradas
hallaban en sus puertas
mis abarcas heladas,
mis abarcas desiertas.

Poemas sueltos IV. Poesías completas.
Madrid: Aguilar, 1979, pp. 517-518.